Las películas infantiles: una gran herramienta para aprender inglés

Las películas para niños pueden ser una herramienta excelente para aprender inglés, ya que combinan aspectos de entretenimiento con un lenguaje sencillo y accesible. A continuación, os explicaremos detalladamente por qué este tipo de largometrajes puede ayudarte a mejorar tus habilidades en el idioma:

Lenguaje simple y contextual

Este tipo de películas se caracterizan por contener vocabulario básico; palabras y frases cotidianas que son útiles para principiantes en inglés. Por ejemplo, palabras como happy, sad, friend, eat, play, etc., aparecen con frecuencia. Además, también suele contener frases cortas y repetición. Esto es, los personajes tienden a hablar de manera clara, con oraciones simples y repetitivas que facilitan la comprensión. Todo ello ayuda a reforzar la memoria auditiva y ayuda a interiorizar estructuras gramaticales.

Contexto visual

Asimismo, se da un gran apoyo en las imágenes. Esto quiere decir que las acciones, gestos y expresiones faciales de los personajes ayudan a entender el significado de las palabras y frases sin necesidad de traducción. Por ejemplo, si un personaje dice «I’m hungry» mientras se agarra el estómago, es más fácil asociar la frase con su significado. Sumado a ello, los entornos ricos en detalles también refuerzan la comprensión al dar pistas sobre el contexto.

Pronunciación y entonación

En cuanto a la pronunciación, las voces en las películas infantiles suelen estar diseñadas para ser comprensibles, con una dicción clara y, al escuchar cómo los personajes varían su tono según emociones o situaciones, aprendes a hablar con mayor fluidez y naturalidad.

Motivación y repetición

Como las películas son divertidas, es más fácil mantener el interés. Esto fomenta la exposición repetida al idioma sin que parezca una tarea aburrida. Lo que es más, los niños tienden a ver sus películas favoritas varias veces, lo que proporciona oportunidades repetidas para escuchar las mismas palabras y frases.

Introducción a la cultura

Las películas infantiles también te introducen aspectos culturales de los países angloparlantes, como valores, tradiciones y formas de comunicación. Esto enriquece tu aprendizaje y comprensión del contexto cultural del idioma.

Cómo sacar el máximo provecho a esta actividad

Para usar las películas de manera efectiva, aquí tienes algunos consejos:

  • Selecciona Películas Adecuadas para tu Nivel:
    • Si eres principiante, empieza con películas dirigidas a niños pequeños como Peppa Pig o Dora the Explorer, que tienen diálogos extremadamente simples.
    • Para niveles intermedios, opta por películas de Disney o Pixar como Finding Nemo o Frozen.
  • Activa los Subtítulos:
    • Comienza viendo las películas con subtítulos en tu idioma para entender la historia. Luego, cambia a subtítulos en inglés y, finalmente, intenta verlas sin subtítulos.
  • Repite Frases:
    • Pausa la película y repite las frases que escuches. Esto mejora tu pronunciación y memoria.
  • Escucha la Banda Sonora:
    • Muchas películas tienen canciones pegajosas con letras simples que puedes aprender y cantar, como Let It Go de Frozen.
  • Toma Notas:
    • Apunta palabras o frases nuevas y busca su significado después.
  • Habla Sobre la Película:
    • Trata de resumir la historia o hablar sobre los personajes en inglés. Esto te ayudará a practicar tu escritura y expresión oral.

Ejemplo de películas recomendadas

Algunas de las películas más recomendables para conseguir este objetivo son las siguientes: The Lion King (El Rey León), gracias a su gran vocabulario sobre emocionales y su trama sencilla; Toy Story por sus diálogos sobre situaciones cotidianas y fáciles de entender; Shrek, dado su humor simple y lenguaje accesible; y, por último, Finding Nemo (Buscando a Nemo), debido en gran parte a la relación entre personajes que ayuda a aprender frases comunes.

Las películas para niños no solo hacen que aprender inglés sea divertido, sino que también refuerzan habilidades auditivas, mejoran tu pronunciación y te sumergen en el idioma de manera natural. Con consistencia y un enfoque activo, puedes lograr grandes avances.

Lo que las películas de Disney pueden enseñarnos sobre el inglés

Las películas de Disney son una mina de oro para aprender inglés, ya que combinan historias atractivas, personajes memorables y diálogos que son perfectos para quienes están aprendiendo el idioma. Vamos a explorar cómo las películas de Disney pueden ayudarte a mejorar tu inglés y analizar algunas expresiones interesantes.

Las películas de Disney son especialmente útiles para este propósito gracias al lenguaje adaptado que presentan, ya que pese a estar dirigidas a un público amplio, desde niños hasta adultos, los diálogos están diseñados para ser claros y accesibles, aparte de las canciones, muchas de las cuales presentan frases repetitivas, rimas y estructuras gramaticales fáciles de recordar. De igual modo, el contexto emocional y visual también contribuye, puesto que Disney utiliza fuertes elementos emocionales en sus historias, lo que ayuda a asociar las palabras con sentimientos o situaciones específicas.

Ejemplos de expresiones interesantes en películas de Disney

  • The Lion King (El Rey León)
    • «Hakuna Matata»: Una frase swahili que significa «no te preocupes». Aunque no es inglés, se usa junto con «It means no worries» en la canción. Por este motivo, aprenderás expresiones para calmar a alguien: «Don’t worry about it!» o «No worries!«
    • «Remember who you are«: Recuerda quién eres, una frase de Mufasa a Simba. Esta frase se utiliza para reforzar la identidad o motivar a alguien. También puedes aprender el uso del imperativo.
  • Beauty and the Beast (La Bella y la Bestia)
    • «Tale as old as time”: Una historia tan antigua como el tiempo, de la canción Beauty and the Beast, lo que te ayudará a aprender a usar expresiones para describir algo eterno o clásico: «As old as the hills» (tan viejo como las colinas).
    • «Timeless tale» (Historia intemporal):
    • «There may be something there that wasn’t there before.”, que significa que puede haber algo que antes no estaba ahí. Por ende, te enseña cómo hablar de cambios sutiles. Por ejemplo, «There’s something different about this place«.
  • Frozen
    • «Let it go«: déjalo ir, de la famosa canción, que es una frase muy común en inglés que significa dejar algo atrás emocionalmente. «Just let it go, it’s not worth worrying about«.
    • «The cold never bothered me anyway«: El frío nunca me molestó, aprende el uso de bother (molestar) en frases: «That noise doesn’t bother me«.
  • Aladdin
    • «A whole new world«: Un mundo completamente nuevo, lo cual nos enseña a usar whole para enfatizar («This is a whole new experience for me.»).
    • «You ain’t never had a friend like me.»: Nunca has tenido un amigo como yo. Aunque usa una forma gramatical incorrecta (ain’t), es útil para entender el inglés coloquial («You’ve never seen anything like this.»).
  • The Little Mermaid (La Sirenita)
    • «Part of your world«: Parte de tu mundo, de la canción de Ariel, que nos enseña a utilizar part of: («I want to be part of this team.»).
    • «The human world is a mess”: El mundo humano es un desastre, dicho por Sebastián. Todo ello puede ayudarnos a aprender formas de describir problemas: «This place is a mess!».
     

Aspectos gramaticales y vocabulario que nos ofrecen las películas de Disney

Podemos destacar la presencia de condicionales. Este es el caso que podemos observar en la película de Aladdin: «If I had a genie, I would wish for…» (Si tuviera un genio, desearía…). Igualmente, encontramos adjetivos interesantes y comparaciones. Por ejemplo, en la película de Cinderella (Cenicienta): «The slipper fits perfectly.» (El zapato encaja perfectamente). Por último, no podemos olvidar las expresiones idiomáticas. Por ejemplo, en The Lion King (El Rey León): «Circle of life» (El ciclo de la vida), para hablar de algo recurrente.

Estrategias para aprender con películas de Disney

Algunas de las estrategias más recomendables para mejorar tu inglés viendo películas de Disney son escuchar y cantar las canciones (ya que estas son ricas en vocabulario y ayudan con la pronunciación); repetir los diálogos (pausa la película y practica frases que te parezcan interesantes o útiles); poner los subtítulos en inglés para asociar el sonido con las palabras escritas; imitar a los personajes (el imitar el tono y la entonación de estos para mejorar tu pronunciación); y, para concluir, escribe y reflexiona (haz una lista de nuevas palabras o frases y úsalas en tus propias oraciones).

Películas Disney recomendadas según tu Nivel

  • Principiante: The Lion King, Frozen, The Little Mermaid.
  • Intermedio: Aladdin, Beauty and the Beast, Cinderella.
  • Avanzado: Mulan, Pocahontas (por sus temas más complejos y vocabulario histórico).

Cómo las películas de Disney pueden ayudarte a mejorar tu nivel de inglés y a reforzar el vínculo con los más pequeños de la casa

Las películas de Disney no solo son una ventana a un mundo mágico, sino también una herramienta poderosa para aprender inglés de manera divertida y significativa. ¡Prepárate para cantar, repetir y sumergirte en el idioma mientras disfrutas de estas obras maestras!
Como podemos observar, este tipo de películas en inglés puede no solo ayudarte a mejorar tu nivel de inglés, sino que también puede ayudarte a pasar tiempo de calidad con los más pequeños de la familia De hecho, ver películas de Disney no solo es una excelente forma de aprender inglés, sino también una maravillosa actividad para compartir tiempo de calidad con tus hijos o hermanos pequeños y fomentar en ellos un interés temprano por el idioma. A continuación, explicaremos de manera detallada cómo esta experiencia puede ser enriquecedora tanto para ti como para ellos:

En primer lugar, se trata de una actividad compartida que ayuda a fomentar el tiempo de calidad. Sentarse juntos a ver una película de Disney crea un espacio para disfrutar en familia, libre de distracciones como el trabajo o los dispositivos y después puedes aprovechar la película como punto de partida para hablar sobre los personajes, la historia o los valores que transmite, fortaleciendo los lazos familiares. Por ejemplo, puedes plantearles las siguientes preguntas: «¿Qué te gustó más de la película?» o «¿Qué aprendimos de la historia de Simba? Esto podría ser el inicio de una conversación más profunda.

De igual modo, como bien se expone en esta entrada, las películas de Disney son ideales para familiarizar a los niños con el idioma inglés desde una edad temprana. Los niños son como esponjas para aprender idiomas. Al escuchar inglés en las películas, comienzan a captar sonidos, palabras y estructuras gramaticales de manera natural. Asimismo, esto contribuye a que relacionen el inglés con algo divertido, como una película o canción, hace que aprendan sin sentir que están «estudiando». Un ejemplo de ello sería cantar juntos «Let it go» o «A whole new world». También les permite aprender vocabulario básico, puesto que palabras simples como happy, sad, friend, love, y play aparecen frecuentemente en las películas, construyendo así una base sólida para el aprendizaje.

No podemos olvidar que las películas de Disney no solo enseñan inglés, sino que también transmiten importantes valores que puedes discutir con tus hijos. Podemos destacar los siguientes valores: empatía y resiliencia en la película de Inside Out (Del Revés); superación y valentía en Mulan, que muestra la importancia del coraje y la autodeterminación.; amistad y trabajo en equipo en Toy Story, una película que refuerza el valor de la amistad y la cooperación.
El hecho de hablar sobre estas lecciones mientras practican inglés refuerza tanto los valores como el aprendizaje del idioma.

Sin embargo, tenemos que tener presente que, para convertir esta actividad en una experiencia educativa y entretenida para toda la familia, es recomendable incorporar actividades adicionales relacionadas con la película. Un ejemplo de ello, es cantar juntos las canciones, que son pegadizas y fáciles de aprender. Esto no solo mejora la pronunciación, sino que también refuerza la conexión emocional. De igual manera, se puede jugar a representar escenas: haz que los más pequeños representen sus escenas favoritas en inglés. Esto ayuda a mejorar su memoria y confianza para hablar en el idioma. Además, también se pueden buscar páginas para colorear de sus personajes favoritos con descripciones en inglés, como Simba is a lion o Ariel loves the sea o crear minidiálogos (inventa diálogos simples en inglés con los personajes para practicar juntos).
Evidentemente, todas estas actividades presentan numerosos beneficios para los más pequeños, quienes además de aprender inglés, mejoran la comprensión auditiva (escuchar frases en inglés en contexto mejora su capacidad de entender el idioma); aprenden la pronunciación correcta (copiar cómo hablan los personajes ayuda a desarrollar una buena pronunciación desde temprano); adquieren una mayor confianza en el idioma (aprender inglés a través de algo que aman los hace sentir más cómodos al usarlo en otros contextos); y ponen en práctica su creatividad e imaginación (las historias fantásticas de Disney estimulan su imaginación mientras adquieren nuevo vocabulario).

No obstante, algo que puede no resultar tan obvio es que los adultos también se benefician significativamente al compartir esta actividad. Esto se debe a que estas actividades implican una práctica constante (al escuchar las mismas frases y palabras, refuerzas tu comprensión y memoria del inglés). De igual modo, contribuyen a una mejora de la pronunciación y de la fluidez (al cantar o repetir diálogos con tus hijos, mejoras tu propia pronunciación y entonación) y establecen una motivación compartida (enseñarles inglés a tus hijos a través de películas puede motivarte a aprender más para guiarlos mejor).

Los siguientes consejos ayudarán a mejorar la calidad del tiempo en familia: escoge una película según el nivel de inglés de la familia (para principiantes, películas como Finding Nemo o The Lion King son ideales; para niveles más avanzados, intenta con Frozen o Mulan); pon subtítulos (comienza con subtítulos en español, luego pásalos a inglés para que ambos niveles se beneficien); haz preguntas durante y después (por ejemplo, «¿Qué significa esa palabra?» o «¿Qué crees que quiso decir ese personaje?»); establece un ritmo semanal (haz una “Noche de Películas Disney” semanal para mantener la consistencia); combina con libros en inglés (complementa las películas con libros ilustrados de Disney en inglés para reforzar vocabulario y lectura).

En resumen, ver películas de Disney en inglés es mucho más que una forma de aprender el idioma; es una oportunidad para compartir momentos significativos con tus hijos, enseñarles valiosas lecciones y abrirles la puerta a un mundo de aprendizaje divertido y enriquecedor. Juntos, pueden disfrutar de historias mágicas mientras se sumergen en el inglés de manera natural y memorable. ¡Es una experiencia que quedará grabada en sus corazones y mentes!

 

Otras maneras de introducir a los más pequeños en el mundo del inglés

Introducir a los niños al inglés desde pequeños es una excelente idea, ya que a esta edad su capacidad para aprender un segundo idioma es muy alta. Aquí te presento diversas estrategias para hacerlo de forma efectiva, divertida y natural. Para ello, jugar con el idioma es esencial, ya que el juego es la forma más natural para que los niños aprendan. Existen diversas aplicaciones y juegos interactivos que pueden ayudarnos a alcanzar este objetivo. Usa aplicaciones diseñadas para enseñar inglés como Duolingo Kids, Lingokids o ABCmouse. Estas herramientas incluyen juegos, canciones y actividades adaptadas a su nivel. También puedes recurrir a juegos de mesa en inglés. Algunos ejemplos de ello son Scrabble Junior, Guess Who? (¿Quién es quién?) o flashcards con imágenes y palabras en inglés son ideales. Sin embargo, también existe la posibilidad de crear nuestros propios juegos: juegos con dinámicas simples como Simón dice en inglés (Simon says: Jump!), o buscar objetos de cierto color (Find something red!) fomentan vocabulario básico.

De igual modo, hacer que el inglés forme parte de la vida cotidiana es clave. Es de vital importancia hablar en Inglés: usa frases simples en inglés en contextos específicos, como «What do you want to eat?» durante el desayuno o «Put on your shoes» a la hora de vestirse.
Otra buena forma de practicar inglés es etiquetar objetos en casa con su nombre en inglés (table, chair, door), lo que refuerza el vocabulario visualmente o cantar canciones infantiles como Twinkle, Twinkle, Little Star, Old MacDonald Had a Farm, o If You’re Happy and You Know It ayudan a aprender palabras nuevas de manera lúdica.

Por otra parte, el contenido multimedia puede ser una gran herramienta si se usa correctamente. Además de las películas de Disney, introduce series como Peppa Pig, Bluey, o Dora the Explorer, que tienen diálogos simples y repetitivos. Usa también canales en YouTube como Super Simple Songs, Cocomelon o Pinkfong. Las canciones incluyen gestos y movimientos que refuerzan el aprendizaje. Otra posibilidad es escuchar audiolibros como The Gruffalo o Goodnight Moon les ayuda a familiarizarse con el ritmo y pronunciación del idioma.

Asimismo, leer en inglés es una forma excelente de desarrollar vocabulario y comprensión. Para ello, podemos servirnos de libros ilustrados. Opta por libros con imágenes llamativas y texto sencillo, como Brown Bear, Brown Bear, What Do You See? de Eric Carle o Goodnight Moon de Margaret Wise Brown. Tampoco olvides los cuentos bilingües (libros que incluyen texto en inglés y español permiten que los niños comparen los idiomas) y las historias interactivas (usa aplicaciones como Storynory o Epic! que combinan lectura y audio).

También será necesario crear un ambiente de inmersión, ya que cuanta más exposición tengan al inglés, más fácil será para ellos aprender. Para conseguir esto, aunque no seas nativo, intenta hablarles en inglés durante ciertos momentos del día o incluso, si tienes amigos o familiares que hablan inglés, anímalos a interactuar con tus hijos en este idioma y, si tienes la oportunidad, inscríbelos en programas diseñados para su edad, como clases presenciales o en línea que incorporen juegos y actividades.

Por su parte, el contacto directo con el idioma es invaluable. Visita países donde se hable inglés expone a los niños al idioma de manera inmersiva y celebra tradiciones como Halloween o Christmas en inglés. Pueden hacer actividades como decorar calabazas o escribir cartas a Santa Claus en inglés.

Tampoco podemos olvidar la importancia de repetir sin presión: no importa si no entienden todo de inmediato; la repetición y la paciencia son clave ni de elogiar el progreso: celebra cada avance, incluso si es pequeño, para que se sientan motivados y evita saturarlos; es mejor sesiones cortas pero frecuentes.

De igual modo, pueden hacerse manualidades con instrucciones en inglés; sigue pasos simples en inglés para hacer proyectos, como pintar o construir figuras. Además de cocinar juntos; sigue recetas en inglés (por ejemplo, hacer galletas puede incluir vocabulario como flour, sugar, mix, bake) y escribe historias cortas (crea cuentos sencillos en inglés juntos, usando palabras que ya conocen).

Para finalizar, lo más importante para todo esto es que el aprendizaje debe ser siempre divertido y adaptado a sus intereses. Por ejemplo, si les gusta un tema, como dinosaurios o superhéroes, busca libros, videos o juegos en inglés relacionados. Tampoco conviertas el inglés en una obligación. Si lo asocian con algo positivo, aprenderán más rápido. También debes mostrar entusiasmo: si ven que tú disfrutas aprender inglés, es más probable que quieran imitarte y, si no eres fluido en inglés, esta es una gran oportunidad para aprender junto con ellos. Esto también fortalece el vínculo entre ustedes.

En conclusión, introducir a los niños al inglés desde pequeños puede ser un proceso enriquecedor y divertido si se hace de manera natural. Al incorporar el idioma en juegos, rutinas, lecturas y actividades creativas, no solo estás fomentando su desarrollo lingüístico, sino también fortaleciendo el vínculo familiar y despertando su curiosidad por el mundo. Puedes empezar por las películas de Disney e ir introduciendo el inglés en la rutina poco a poco. ¡La clave está en hacerlo divertido y constante!